Cuando esperas iluminarte a la semana o mes de practicar y no sucede nada, o cuando le has pedido a algo a los budas y no te oyen… debes sospechar que algo anda mal: generalmente eres tú o tu práctica.
Aquí algunos pasos para que entiendas mejor lo que ocurre cuando te estás involucrando en una práctica nueva.
Generalmente, todo el proceso, desde que conoces la práctica hasta obtener sus resultados, pasa por tres etapas y vale la pena conocerlos ya que cada etapa aporta algo distinto y requiere de enfocarnos en otras cosas.
Etapa 1. Conoce la técnica
Es la primera parte, la más breve de todas pero de una gran importancia. Aquí el practicante integra el conocimiento de la filosofía, la técnica con su propia situación y “el rompecabezas” comienza a resolverse. Lo más importante es aprender bien lo que tienes que saber: posturas. Respiraciones, oraciones, mantras, mudras, visualizaciones – todo lo que se parte de la práctica, lo debes dominar a la perfección para que la experiencia fluya.
Me da tristeza ver a los practicantes, años después de haber recibido enseñanzas de una práctica, que siguen leyendo los mantras o no saben la secuencia de la práctica. ¿Cómo pueden pretender que el resultado sea correcto cuando ni siquiera dominan la técnica?
Etapa 2. Conoce la experiencia
Desde el primer momento, cuando comenzamos a practicar, tenemos experiencias pero es muy importante asegurarnos que la experiencia sea correcta y constantemente verificar si vamos por un buen camino.
Un Maestro siempre explica para “que” es la práctica y “cual” es finalidad. Si uno entiende esto puedo medir su progreso, de otra manera sola podrá “sentiré bien” – como experiencia principal.
La segunda etapa es justamente ese periodo de tiempo cuando las experiencias enriquecen al practicante, de manera consciente y clara, logran la transformación o moverlo de un lugar a otro. Es la etapa que puede durar mucho tiempo ya que es cuando construimos la experiencia final y acumulamos sus beneficios. Es la práctica formal con todos sus atributos y cuando formalmente practicamos las cualidades o estados en la mente, fortaleciéndolos – es un entrenamiento de la mente. Un practicante debe realizar esta etapa tanto tiempo cuanto sea necesario para realizar los resultados claros y estables.
Etapa 3. Conoce el resultado
Esta es la etapa cuando la práctica ocurre por sí misma, como dice Lama Tenzin Wangyal: la mejor práctica es la no práctica”.
Es la manera en la que la práctica se integra en la vida diaria, sin esfuerzo, espontáneamente, a un practicante atento, se le aparece el entendimiento y la experiencia de la práctica en su entorno e interior sin buscarlos, y de esta manera todo converge en la mente, soportando permanentemente la “no practica”.
¡Recuerda que de vez en cuando hay que regresar a la práctica formal!
Cada una de las etapas requiere de otro trabajo pero cuando cumplimos con las tres, el resultado brilla en su presencia y nunca termina de beneficiarnos. De otra manera, al no verte beneficiado de manera clara, dudaras de la práctica y te preguntarás ¿qué pasa con mi práctica y porqué no sirve?
3 Comments
En lo personal al principio de mi práctica encontré tantas que me gustaban, cinco elementos, Yeshe Walmo, sílabas guerreras, gotas del corazón, nueve respiraciones, etc. Que iba de una a otra sin profundizar en ellas, sólo por que las disfrutaba…hoy soy más conciente de los beneficios internos, como por ejemplo duermo soltando el discurso después de nueve respiraciones libre de pensar, en algunas situaciones optó por un silencio profundo sin necesidad de defenderme y me he hecho consciente de con quienes me engancho con mi habla (en este caso mi familia), en otras también reconozco el espacio y sutilmente encuentro la apertura y en ella la compasión, incluso la dicha y hasta el amor que no creía que estaba ahí, Actualmente me dedico a una sola prácticapor un mes o dos, sólo de esta forma he podido integrar la secuencia…sin embargo aún tengo conflicto para solicitar a los Budas algo en específico. Gracias por compartir.
Gracias Rose, lo que dices es parte de nuestro desarrollo espiritual. Te felicito
Que nota tan ejemplar, y significativa, estas etapas que por cierto yo aprendí con el maestro de meditación Wojtek, si son fundamentales, todo requiere esfuerzo, estudio, gozoso pero esfuerzo, y asi se suceden las etapas, y son para dedicar tiempo y espacio en nuestras vidas, abrir el corazón y aceptar con alegría todo, todo lo que venga para seguir solo seguir con la deteminación de lograr los límites a los asuntos tóxicos, de la mejor o ¿de la peor manera’ si practicamos bien, si disolvemos realmente pues de la mejor…